La Procuraduría Anticorrupción ha solicitado extraditar al ex presidente Alberto Fujimori por un delito que prescribió hace aproximadamente dos años.El tema podría resultar hasta anecdótico sino se tratase que el plazo que tiene la justicia peruana para presentar los documentos ante los jueces chilenos es bastante corto y los errores resultan en este caso inconvenientes, no sólo por la pérdida de tiempo sino porque ello podría abundar en la tesis de que el ex mandatario es víctima de una persecución política.El plazo dado por el país del sur, en virtud al tratado de extradición que mantienen con el Perú, es de 60 días. Ya ha trascurrido una semana y las cosas marchan a paso lento.(Edición domingo).