El primer ministro, Óscar Valdés, reveló ayer que, según informes que posee el Ejecutivo, el objetivo detrás de las protestas antimineras simultáneas en Espinar y Cajamarca es la paralización del proyecto minero Las Bambas, en Apurímac."Los que están haciendo el problema en Espinar no solo quieren a Tapacay y Tintaya, están poniendo la visión en Las Bambas y quieren paralizar la actividad minera sin ninguna razón que les asista", señaló en el programa Cuarto Poder.Consideró que las protestas sociales, sumadas a la falta de gestión de las autoridades, ocasionan que la población no perciba los beneficios de la actividad minera.