En su oficina en pleno corazón de la capital nipona, Satomi lleva las riendas de su negocio, el hotel Princess Garden, del que es, al mismo tiempo, propietaria y gerenta, y sigue muy atenta, a través de internet, cómo evoluciona la situación del ex mandatario. Satomi Kataoka es una mujer de armas tomar. Los periodistas japoneses se refieren a ella como "el tipo de mujer que no lloriquea". Es más bien fuerte y activa, una mujer de acción.Satomi tuvo conocimiento de los planes de Fujimori para regresar al Perú hace dos años."Estaba un trescientos por ciento segura de que lo lograría, le dije a Alberto cuando lo fui a dejar al aeropuerto con rumbo a México y a Chile". La última vez que Satomi se comunicó con Fujimori fue a escasas dos horas de que un destacamento de carabineros se hiciera presente en el céntrico hotel Marriott para trasladar al ex presidente detenido a la Escuela de Investigaciones Policiales de Chile. En dicha conversación Fujimori en tono calmado le aseguró encontrarse en buen estado y optimista por la forma en que se desenvolverán los acontecimientos. "Alberto me dijo que no me preocupara, que todo va a salir bien", recuerda. Ella misma, hace apenas un mes, había deslizado la decisión de su novio de retornar al Perú.Mire, yo sigo pensando que Fujimori es un genio y no tengo duda de que él sabrá salir de este problema porque ya tiene la solución.