El fiscal de la Nación, José Peláez Bardales, resaltó ayer la importancia de las acciones de interdicción contra la minería ilegal en el país y advirtió que esa actividad ilícita está causando un daño "enorme e irreparable" en la selvática región Madre de Dios. Indicó, en ese sentido, que además de los fiscales especializados en temas ambientales que fueron enviados a Madre de Dios, su despacho ha dispuesto una partida especial para la contratación de más peritos que ayuden a afrontar ese problema. Añadió que para el desarrollo de sus actividades, en las zonas de exclusión, los fiscales necesitan del apoyo de la Policía y de las Fuerzas Armadas, y recordó que ya anteriormente han trabajado juntos, cuando fueron destruidas varias de las dragas que contaminan los ríos en Madre de Dios. "Estas dragas, que operan a la vista y paciencia en las zonas prohibidas, están causando un daño enorme e irreparable", señaló. Conforme con la nueva legislación, Peláez recordó que la actividad depredadora de la minería ilegal en las zonas naturales protegidas está penalizada como delito que será sancionado hasta con prisión efectiva.