PARA QUE SE MUEVAN MÁS LAS INDUSTRIAS
20 de marzo de 2012

PROMOCIÓN. Las grandes empresas industriales del país explican el grueso del valor agregado bruto de la producción (VAB) manufacturera y, efectivamente, la mayoría de ellas ha innovado e invertido para reforzar su presencia en el mercado. Este comportamiento se observa principalmente en el rubro alimentos y bebidas, que representa el 32% del mencionado VAB.El problema es que son muy pocas empresas, lo que significa que en la industria peruana existen dos tipos de concentración: pocos rubros y un número limitado de compañías que producen la mayor parte de bienes. Es claro que estas no requieren de políticas promotoras de parte del Estado sino de que se mantenga el orden en el manejo macroeconómico que les permita, de ser el caso, obtener capitales frescos del exterior.Son las medianas, pequeñas y micro empresas manufactureras las que necesitan una política que impulse su desempeño y les brinde acceso a herramientas clave que por su envergadura no están en condiciones de obtener como, por ejemplo, información. Estamos de acuerdo con la viceministra de Mype e Industria, Gladys Triveño, de que no es necesaria una nueva ley de industria para desarrollar el sector. Si ese fuese el caso, con la frondosa legislación que tenemos, el Perú ya sería potencia mundial.Los anteriores gobiernos se acostumbraron a acumular diagnósticos y estudios acerca de la situación de la manufactura nacional, pero no supieron (o no quisieron) poner manos a la obra en temas como generación de valor agregado, capacitación, tecnología, desarrollo de clústeres y descentralización. Está por verse si esta vez las buenas intenciones se convertirán en buena práctica, por lo que alentamos a la viceministra Triveño a no tomarse demasiado tiempo en recolectar información estadística de su sector, pues esta es abundante, sino en diseñar un programa promotor que sí pueda implementarse.Como este esfuerzo demandará la participación de otros ministerios e instituciones públicas -y de los gremios privados-, la capacidad coordinadora de Triveño será fundamental. Por último, saludamos que no haya mencionado exoneraciones tributarias pues no incentivan sino que generan ineficiencias. Lo que se requiere es que el Estado también sea innovador.

  • [Gestión,Pág. 18]
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