La iniciativa peruana para fijar "líneas de base" a partir de las cuales se establecerá nuestro dominio marítimo, impactó una vez más la frágil relación bilateral con Chile, caracterizada en los últimos meses por varios impasses diplomáticos.El proyecto de ley, aprobado el lunes en la Comisión de Relaciones Exteriores, propone que se establezcan puntos de referencia (líneas de base), a lo largo de toda la costa, en base a los cuales se hará la proyección hacía el mar hasta una distancia de 200 millas. En la frontera con Chile se establece una línea de base que responde a la posición peruana de que el límite marítimo entre ambos países es la línea equidistante, y no la paralela como señala Chile.La reacción chilena subió de intensidad ayer. En la mañana el vocero de Chile Osvaldo Puccio consideró la iniciativa como "un tema delicado" y horas más tarde la Cancillería de ese país entregó al embajador peruano en Chile, José Antonio Meier, una nota de protesta. Al mismo tiempo se anunció que Chile solicitará a la OEA tratar el tema.(Edición sábado).