"EL AGUA ES PRIMERO, LA MINA, DESPUÉS"
16 de febrero de 2012

Febrero es mes de lluvias y carnavales y también de "marchas por el agua" que en realidad son marchas contra la inversión y el progreso. Desde la suspensión del proyecto Conga poco se ha hecho para difundir los verdaderos alcances de éste y desmentir a sus detractores. Para despejar esas dudas entrevistamos al gerente de responsabilidad social de ese proyecto, Darío Zegarra. Correo: ¿Las constantes postergaciones del gobierno respecto al peritaje del EIA afectan al proyecto?Darío Zegarra: Nosotros llegamos al peritaje luego de la suspensión, un escenario no previsto originalmente por la empresa. Yanacocha está convencida de la fortaleza del EIA. Son quince años de estudios y de discusión con autoridades y comunidades que lo fueron enriqueciendo. Lo que sí preocupa es la falta de voluntad de concertar sobre la base de información técnica y científica por parte de ciertos actores, lo que a su vez determina que el interés es político antes que ambiental.Pero cada día que pasa juega en contra de Conga.Es una gran complicación sin duda, pero no sólo para nosotros sino para toda la dinámica económica que ya se venía generando. Hasta setiembre de 2011, firmamos contratos con 50 empresas locales por US$70 millones que ya se habían endeudado para adquirir maquinaria. Ya teníamos a 3,000 pobladores de caseríos locales capacitados para entrar a trabajar al proyecto. Incluso iniciativas inmobiliarias en Cajamarca se han debido postergar. Eso también debería ponerse en la balanza cuando se habla de paralizar Conga.