¿Escogería mejor a sus autoridades si conociera más sobre ellas? Si usted cree que sí, pues sepa que muchos de nuestros congresistas le dirán que no. El inicio del debate en el pleno del Congreso de la llamada hoja de vida de los candidatos ha puesto al descubierto que no solo hay varias alternativas sobre los alcances de este planteamiento, sino que existen parlamentarios que a toda costa se opondrán a la también llamada declaración jurada de vida, a pesar de que es un paso adelante en la transparencia política y una respuesta a la sabiduría popular cuando reclama que no le den gato por liebre.Ayer, el presidente de la Comisión de Constitución, Ántero Flores-Aráoz (UN), anunció que el dictamen en mayoría de la hoja de vida se votará en el pleno del jueves 27 de octubre. Dicha propuesta incluye estudios, experiencia laboral, trayectoria política y la relación de sentencias condenatorias por delito doloso y que no hayan sido apeladas.Es precisamente este último punto el que genera discrepancias entre quienes apoyan la hoja de vida. Por ejemplo, los parlamentarios Javier Diez Canseco y Yonhy Lescano (ambos de UPD) han presentado un dictamen en minoría para incluir las obligaciones familiares, contractuales y laborales. El fin es claro: conocer si cumplen con sus hijos, detectar sus vínculos con empresas privadas y saber si tienen problemas con sus trabajadores.(Edición sábado).