La Organización de Países Exportadores de Petróleo acordó un nuevo límite de producción por primera vez en tres años, con lo que puso fin a seis meses de una dura pelea que terminó favoreciendo la postura de Arabia Saudita. La OPEP acordó un objetivo de producción de 30 millones de barriles por día, lo que ubica a la meta en línea con su bombeo actual.