La Conferencia Anual de Ejecutivos (CADE) empezó su edición 2011 en la ciudad del Cusco con una sorpresiva cancelación de última hora: el presidente Ollanta Humala, quien debía inaugurar el foro, no se hizo presente. Pero esa no fue la única suspensión que hizo el mandatario. Por la noche, un comunicado de la Secretaría de Prensa de Palacio de Gobierno confirmó lo que durante el día fue un rumor: que no viajará a la Cumbre de América Latina y el Caribe (CALC), que se efectúa entre hoy y mañana en Caracas (Venezuela) y donde nacerá la comunidad de estados latinoamericanos y caribeños (Celac). Tampoco irá a la Cumbre de la Alianza del Pacífico, que se llevará a cabo el domingo en Mérida (México).El comunicado indicó que Humala no viajaba "por motivos de agenda interna". Esas razones son, por ejemplo, las protestas en Cajamarca por el proyecto minero Conga (donde se impone la posición intransigente de los líderes regionales opuestos a cualquier diálogo), el paro en Cañete por la construcción de un nuevo penal (donde se está cediendo ante los protestantes) o el bloqueo indefinido de la Panamericana Sur, en Nasca, por parte de mineros informales que exigen al Estado facilidades para formalizarse.