Ayer por la mañana, un significativo grupo de trabajadores del Complejo Metalúrgico de La Oroya (CMLO) se aglutinó en las puertas del Instituto de Defensa de la Competencia y Propiedad Intelectual (INDECOPI), en San Borja, para hacer escuchar su voz de apoyo y haciendo causa común con el Plan de reestructuración ofrecido por Doe Run Perú, empresa propietaria de CMLO, y que también opera la mina Cobriza, ubicada en Huancavelica, que actualmente está operativa y procesa 85,000 TM de concentrados, dando trabajo a más de 1,200 personas.Luis Castillo, trabajador de La Oroya y Secretario General de la Federación de Trabajadores Mineros, Metalúrgicos y Siderúrgicos del Perú (FTMMSP) sostuvo que el Indecopi tiene la obligación de calificar de manera legal y objetiva las acreencias presentadas, para que en el más breve plazo se convoque a la Junta de Acreedores que ordene el reinicio de las operaciones en la fundición.