Una tensa calma se respiró ayer en Madre de Dios. No se registraron incidentes, pero tampoco se llegó a ningún acuerdo. Los mineros ilegales del sector de La Pampa, ubicado en la zona de amortiguamiento de la reserva de Tambopata, no respondieron con claridad a la propuesta de las autoridades regionales. Estas los habían invocado a retirar voluntariamente su maquinaria antes del sábado.Florencia Luna Vilca, uno de los dirigentes mineros, se limitó a señalar que para ellos es imposible retirar sus maquinarias en menos de 15 días. "Queremos la formalización, pero no pueden dejar a 30.000 personas sin trabajo. La desesperación llega a un límite y así empiezan los paros", advirtió Luna.El director de operaciones especiales de la Policía Nacional, general Américo Villena, señaló que están dispuestos a dialogar con los mineros informales de La Pampa, pero resaltó que por ningún motivo dejarán que la informalidad siga depredando los bosques de Madre de Dios y poniendo en riesgo la salud de la población.