La ciudad de Andahuaylas paralizó totalmente sus actividades comerciales, en el quinto día del paro organizado por agricultores y regantes, quienes exigen al gobierno central suspender cualquier actividad minera en las cabeceras de cuencas, ya que consideran que esto perjudica sus cultivos. La presión de estos sectores ha obligado a que todos los negocios públicos y privados de la ciudad cierren sus puertas al público desde el domingo, incluso frustrando la tradicional feria de estos días, donde llegaban compradores de otras zonas de la Región Apurímac.Como parte del bloqueo de pistas, los manifestantes mantuvieron cerrada la carretera de acceso Andahuaylas-Abancay a la altura del kilómetro 12, en la comunidad de Champaccocha, el distrito de San Jerónimo, limitando así la salida de la zona y el número de vehículos de transporte público.El representante de la Junta de Usuarios del Distrito de Riego de Andahuaylas y Chincheros, Pelayo Hurtado Guszán, solicitó al Gobierno Regional de Apurímac que apruebe una resolución que prohiba toda actividad minera en carreteras, cuencas, microcuencas, ojos de agua, bofedales y zonas agrícolas.