Un informe de El Comercio del 11 de setiembre del 2011 recoge la denuncia de mineros ilegales en Madre de Dios que afirmaban haber entregado a Amado Romero oro por un equivalente a US$300 mil para extraer mineral. La Dirección Regional de Minería había acusado al legislador oficialista ante la fiscalía, pero este evadía las citaciones. En respuesta a esta denuncia, el día 13 parlamentarios de varias bancadas -incluida la oficialista- piden que se investigue a Romero, dueño de varias concesiones mineras en Madre de Dios, por la extracción ilegal de oro en la región.