La conclusión es determinante: "Hasta que no se reduzcan las emisiones de plomo en el aire, ninguna medida servirá para solucionar el problema de la contaminación del medio ambiente en La Oroya, lo cual ha dejado como consecuencia que la población, particularmente los niños, tengan metal en la sangre".Esto se concluye del estudio realizado por científicos estadounidenses del Centro Nacional de Salud Ambiental, del Centro de Control y Prevención de Enfermedades, de la Agencia para el Registro de Sustancias Tóxicas y Enfermedades y de la División de Servicios de Emergencia y de Salud Ambiental.El trabajo, realizado por encargo de la Agencia Internacional para el Desarrollo-Misión Perú, fue dado a conocer en Huancayo por el secretario ejecutivo del Consejo Nacional del Ambiente (Conam), Carlos Alberto Rojas Marcos. La empresa Doe Run en reciente conferencia de prensa aseveró, sin embargo, que se están haciendo acciones directas para reducir la exposición de niveles de plomo.José Gustavo Mogrovejo, asesor de la Doe Run, asegura que la empresa ha firmado un convenio con el Ministerio de Salud para que dicha entidad defina los trabajos que se deben hacer para reducir los niveles de exposición y controlar finalmente el problema.(Edición sábado).