Solo quedan seis meses para que se cumpla el plazo fijado por el Estado para el cumplimiento del Programa de Adecuación y Manejo Ambiental (PAMA) en el complejo metalúrgico de La Oroya en Junín. Sin embargo, Doe Run Perú (DRP), minera operadora de la refinería, no ha cumplido a la fecha con lo dispuesto en la ley 29410, que disponía 36 meses para la reactivación de La Oroya.Se sabe que las empresas mineras acreedoras -a las que Doe Run Perú les debe más de US$ 110 millones- estarían presentando al Gobierno una alternativa para reactivar el complejo metalúrgico, sin contar con la participación de DRP.Este planteamiento consistiría en una extensión del PAMA para La Oroya y el pago total de la remuneración a todos los trabajadores de la metalúrgica. El personal en La Oroya solo recibe el 70% de sus salarios.