La última encuesta de Datum, correspondiente al mes de octubre, corrobora que los temores iniciales por la llegada de Ollanta Humala a la presidencia se han disipado, por el momento. Dos botones de muestra. En primer lugar, el 56% del segmento A y B aprueba al mandatario, a lo que se suma las declaraciones del presidente de Repsol, quien tras una reunión en Palacio de Gobierno dijo: "Repsol solo puede tener una posición: hacer lo que pida el Gobierno".A lo anterior debe agregarse que el Gobierno no enfrenta oposición, Alejandro Toledo y Keiko Fujimori tienen una alta desaprobación, mientras que el ex presidente Alan García guarda un estratégico perfil bajo.Aunque la popularidad se mantiene alta, no se puede pasar por alto que ha disminuido cuatro puntos porcentuales con respecto a setiembre. Asimismo, hay que tener en cuenta que la mayoría de peruanos percibe que el presidente tiene la intención de reelegirse (pese a que lo ha negado y que la Constitución se lo impide). En este escenario surgen problemas, además de enfrentar la turbulencia de la economía mundial. Ello se ve en el hecho de que la gran mayoría percibe que el Gobierno hace poco o nada para solucionar problemas como el terrorismo, el narcotráfico, la delincuencia, los cultivos ilegales de coca y los conflictos sociales.Otro aspecto importante es que la encuesta revela la caída de la aprobación de los principales ministros, incluido el de la cartera de Economía y Finanzas.No obstante, en lo económico, el sondeo confirma el retorno del optimismo, es así que para el 67% la crisis mundial tendrá poco o ningún efecto. También es destacable que la mayoría considere que el sector privado tiene un rol más importante que el Estado en generar trabajo y en aportar en mayor medida al desarrollo del país. Este mensaje esperamos que sea tomado en cuenta por el ala radical del Gobierno y de la bancada de Gana Perú.Aunque para algunas encuestadoras como Ipsos Apoyo la luna de miel de Humala puede prolongarse, los próximos meses pueden comenzar a ser la prueba de fuego para el gobierno, sobre todo por las demandas del interior del país.