Mientras en Puno los pobladores se levantan contra la minería porque consideran que dañará sus tierras, en la sierra de La Libertad ocurre todo lo contrario. Un grupo de habitantes, apoyados supuestamente por las rondas campesinas, impidió que la Fiscalía Especializada en Medio Ambiente inspeccionara zonas donde se desarrolla esta actividad de manera informal. Según el titular de esa fiscalía, Óscar Pérez Aguilar, en las localidades de Parcoy y Huaranchal, en las provincias de Pataz y Otuzco, respectivamente, unos 150 pobladores -en cada lugar- bloquearon las vías y detuvieron la intervención. Esto, sostuvo, pese a que participaron veinte policías.Indicó que las diligencias se programaron a raíz de las denuncias que recibieron, en el caso de Huaranchal, de la compañía Siena Minerals, que, pese a tener la concesión, es afectada por los mineros informales que la invaden.