Quizás el anuncio más importante de los realizados durante la presentación de Salomón Lerner y su gabinete es el acuerdo con el sector minero de llegar a un incremento de los montos a pagar por la explotación de los recursos que pertenecen a la nación.Y es importante, porque es una ratificación de lo anunciado durante la campaña electoral, mostrando que era posible lograr un mayor aporte, de manera consensuada, sin que esto afecte el desarrollo del sector. Deja en mal pie a quienes, en el gobierno anterior, negociaron mal, sometiéndose a la voluntad de las empresas, y no imponiendo lo que era un reclamo generalizado.¿Cuánto más pudieron aportar las empresas mineras durante el lustro pasado? ¿Quiénes son los responsables que el Estado dejara de percibir mayores ingresos? El acuerdo al que han llegado las empresas mineras con el Estado es una demostración que es posible establecer nuevos estándares en la forma en que el capital se relaciona con el Estado. Una forma en donde ambas partes logran beneficios suficientes, que permiten mantener el negocio viable, pero a su vez, por los impuestos, lograr que las mejores condiciones de las que goza ese sector puedan ser también beneficiosas para todo el país.Y es también una decisión saludable utilizar dichos ingresos adicionales en inversión en infraestructura, que es la mejor manera de hacer inclusión. Si dichos recursos se invierten en conectar la Sierra, con carreteras, telecomunicaciones y electricidad, y acompañando estas inversiones con fondos destinados a salud, educación y agua y desagüe, se podrá rápidamente tener un impacto en una zona tradicionalmente excluida de la inversión pública.Si bien es preocupante ese sesgo estatista que se deja entrever en una serie de conceptos que se anuncian, ellos van acompañados de decisiones -como el gobierno corporativo en las empresas públicas y su apertura al accionariado privado en ellas- que deben compensar las intenciones que se dejan anticipar.La presentación del gabinete Lerner deja una tranquilizadora sensación. Ahora falta ver cómo se manejará la mayoría parlamentaria, conformada por los nacionalistas y los toledistas, y si ésta logra alejarse de los extremismos a los que algunos pretenden llevarla. Estaremos atentos, señala Juan Carlos Valdivia.