"La justicia no es ingenua y la memoria de los peruanos no es tan frágil", enfatizó ayer el presidente Alejandro Toledo al rechazar las afirmaciones del cabecilla terrorista, Abimael Guzmán, quien, ante los magistrados y en una actitud burlona, se atrevió a decir que no era terrorista, sino un revolucionario.Desde Bélgica, donde inició una visita de trabajo, el mandatario expresó su confianza en la sentencia que la Sala Nacional de Terrorismo le impondrá a Guzmán y a la cúpula senderista. "Todas las instituciones tienen sus deficiencias, pero confío en la justicia; los magistrados pondrán su profesionalismo para que nunca se repitan los años oscuros de Sendero", remarcó.