Anoche la presidenta regional, Cristala Constantinides, manifestó en un programa dominical que la emergencia había dejado cuatro mil damnificados. También pidió al Gobierno Central que declare en emergencia la zona, pues se habría quedado sin servicio de agua potable a consecuencia del sismo. "Solo tenemos reserva para ocho días", indicó preocupada. Según el Comité Operativo de Emergencia Regional, por lo menos 658 viviendas están inhabitables (400 en Calacoa, 190 en Matalaque y 68 viviendas en Soquesane). Mientras que las comunicaciones radiales y telefónicas no han sido interrumpidas.Además, se ha instalado una comisión que con la Policía Nacional distribuirá en las zonas afectadas 200 frazadas, 100 carpas familiares, 100 colchonetas, 50 fardos de ropa de abrigo y 20 carpas livianas. Para ello los comités distritales de Defensa Civil han formado el Sistema de Alerta Temprana, que sigue evaluando los daños.