La denuncia del alcalde de Anco (Ayacucho), Celestino Marín, de un cuarto derrame en el ducto que conduce el gas de Camisea, fue calificada como "una falsa alarma" por ejecutivos de Transportadora de Gas Natural (TGP).El gerente general de la empresa, Alejandro Segret, aseguró que la afirmación de la autoridad edil no tiene sustento, y explicó que se trata de un remanente "muy pequeño" de una filtración de líquidos de gas natural ocurrida el 29 de agosto (segunda falla), que luego afloró en la tierra debido a la presencia de lluvias."Cuando ocurrió el segundo incidente, se aplicó el plan de remediación, pero pudieron haber quedado vestigios en las fisuras de las rocas. Hemos verificado y no se ha encontrado ninguna fuga", indicó.Desde que empezó su operación, en agosto de 2004, el gasoducto de Camisea ha sufrido dos roturas. La primera, en diciembre de 2004, y la siguiente, en setiembre de 2005, así como una filtración a través de un poro, en agosto de este año.