La anunciada marcha de las rondas campesinas en contra de la minera Majaz se desdibujó por la escasa presencia de manifestantes (no más de 400 llegaron a esta ciudad) y por la acción de un grupo del Frente Cívico de los Intereses de Piura. Ellos, en forma simultánea, vociferaban en contra de la privatización del servicio de agua y, en su afán de alcanzar notoriedad, se plegaron a la marcha de los ronderos.La incomodidad de los ronderos se notó en más cuando, en plena manifestación, los dirigentes de las dos movilizaciones trataban de ponerse de acuerdo acerca del recorrido que efectuarían en la ciudad. Hasta Piura llegaron delegaciones de ronderos de Ayabaca y Huancabamba, pero no de San Ignacio y Jaén, tal como se había anunciado en la víspera. "Los ronderos no contamos con recursos para movilizar gente, es por eso que solo hemos traído un grupo representativo de ronderos", dijo a manera de disculpa el presidente de las rondas campesinas de Huancabamba, Edgardo Adrianzén.Luego de casi dos horas de recorrido y haber realizado un mitin en la Plaza de Armas de Piura, los protestantes llegaron hasta la sede del gobierno regional. Allí reiteraron que solo reanudarán el diálogo con el Ministerio de Energía y Minas cuando sea anulado el permiso de exploración que tiene actualmente la minera Majaz.