La postergación hasta después de la segunda vuelta electoral del ajuste a los precios de los combustibles, que dispuso ayer el Gobierno, constituye un embalse de precios que va a ser peligroso para la economía, advirtió el presidente de la Confiep, Humberto Speziani. El Gobierno había anunciado que aplicaría un sistema de opción de compra que mantendría estables los precios de los combustibles de consumo más popular, previo ajuste de aquellos derivados menos populares (gasolinas de 97 y 95 octanos), pero finalmente el Ejecutivo ha optado por congelar nuevamente todos los precios, congelamiento que empezó en febrero. El presidente de la Confiep observó que no es de esperarse que los precios internacionales de los derivados del petróleo bajen, por lo que es probable que tras la campaña electoral se tendrán que hacer los ajustes para desembalsar estos precios en el mercado local.
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