El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, intensificó su campaña contra el alto precio del combustible e instó al Congreso a recortar los 4 mil millones de dólares que las petroleras estadounidenses reciben en subvenciones. "Son medidas que podemos tomar para evitar que a largo plazo el pueblo estadounidense sea víctima de los altos precios del combustible", dijo el mandatario estadounidense en una carta enviada a los principales congresistas republicanos y demócratas."Una de esas medidas es eliminar las subvenciones injustificadas a la industria del petróleo y el combustible, e invertir esos ingresos en energías renovables para reducir nuestra dependencia del petróleo extranjero", agregó.