MÁS PROGRESO CON MÁS ELECTRICIDAD
22 de marzo de 2011

La energía eléctrica es la gran fuerza que impulsa el proceso de desarrollo sostenido de un país. Ella favorece el surgimiento de la gran industria y también la instalación de pequeños talleres y centros comerciales, agiliza la innovación tecnológica y las telecomunicaciones, se modernizan los servicios de salud y la educación. A donde llega la electricidad, llega el progreso, la modernidad y se multiplican las oportunidades, ayudando a superar con celeridad las situaciones de aislamiento, marginación y desigualdad que afectan a millones de pobladores.Cuando el presidente de la República, Alan García Pérez, asumió el mando de la nación hace casi cinco años, la cobertura eléctrica nacional, urbana y rural, era del 74 por ciento. Hoy se encuentra ya cercana la meta de alcanzar el 92 por ciento al cierre de 2011.Cuando se logre ese objetivo, cuya importancia es tan fundamental como la reforma educativa, la construcción de hospitales y la modernización y expansión de la red vial y portuaria, el Gobierno actual habrá llevado la electricidad a más de tres millones de peruanos que antes no contaban con este servicio básico.Por estas razones, resulta satisfactorio para la ciudadanía el anuncio formulado ayer por el ministro de Energía y Minas, Pedro Sánchez, quien informó que el Programa de Electrificación Rural redoblará sus esfuerzos para que culminen este año las obras de electrificación que beneficiarán a un millón y medio de peruanos. Esta ha sido otra de las características del trabajo del Gobierno en materia de electrificación; esto es, priorizar a los sectores más necesitados y marginados de nuestra población del campo y la ciudad. "En lo que va de la gestión del actual gobierno ya hemos interconectado a alrededor de tres millones de peruanos, cuando antes de empezar la administración eran seis millones de personas sin servicio eléctrico", precisó el ministro Sánchez.Pasadas las coyunturas electorales, en el balance objetivo de lo avanzado en el presente lustro, la ampliación de la red eléctrica, la dotación de agua potable a más de tres millones de peruanos, la construcción, mejoramiento y asfaltado de más de diez mil kilómetros de carreras constituirán sólidas bases para que los gobiernos venideros continúen edificando un país con menos pobreza, mejor calidad de vida y más oportunidades para todos. La gran meta del país, de llegar a las celebraciones del Bicentenario de la Independencia, en 2021, con una tasa de pobreza inferior al 10 por ciento, es una ardua tarea de largo aliento que tiene que ser asumida por la ciudadanía en todos los niveles de gobierno, tanto nacional como regional y local.

  • [El Peruano,Pág. 10]
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