DOE RUN EN 60 MINUTES
16 de marzo de 2011

El lunes 31 de julio del 2000, cuando llegué por primera vez como ministro al despacho de Agricultura, encontré sobre el escritorio una carta reciente firmada por el speaker del Partido Demócrata de la Cámara de Representantes del Congreso de Estados Unidos. En ella, en el lenguaje más respetuoso y protocolar, expresaba su preocupación por el trato que el gobierno peruano venía dando a una empresa maderera estadounidense, la que operaba en Madre de Dios, a la que el anterior ministro, por recomendación del entonces Inrena, había paralizado sus operaciones. Inmediatamente me interesé en el tema y convoqué a la jefa del Inrena a mi despacho para un informe sumario. Luego leí los informes y vi las fotos. Al día siguiente, y luego de meditarlo, llamé por teléfono al despacho del señor congresista estadounidense, y hablé con uno de sus asesores para presentarme, explicarle que acaba de jurar el cargo, que había leído su carta, me había interesado en el tema, había investigado los antecedentes y que la medida del gobierno peruano era la correcta. Que encontraba que la muy elegante presión política de su carta era inaceptable y que había conseguido del Presidente de la República autorización para enviarle el avión presidencial (eso fue un bluff, pero funcionó) para que el señor congresista, con sus asesores y expertos, pueda visitar la zona, sobrevolar el área de influencia y percatarse del desastre ambiental que la empresa americana estaba ocasionando. Que en el mismo avión vendrían invitados periodistas de las cadenas NBC, ABC y de la CBS, y que luego podríamos discutir el tema... en el programa 60 minutes de CBS (una especie de Panorama de la televisión de Estados Unidos).Nunca más escuché del despacho del señor congresista. Luego conseguí el muy valioso apoyo del presidente de la Sociedad Peruana de Derecho Ambiental, quien actuó como procurador público del Ministerio, y se terminó con el abuso de la empresa infractora, depredadora de los bosques de Madre de Dios. Dos cables dieron cuenta la semana pasada de que la empresa minera Doe Run está pidiendo el apoyo de su Congreso para que el Perú le permita seguir incumpliendo sus compromisos ambientales. Como estamos a las finales de un gobierno y concentrados o distraídos con las campañas electorales, es necesario estar todos alertas para apoyar las impecables gestiones que el Ministerio de Energía y Minas ha tenido en esta historia. Si Doe Run quiere politizar el tema, y si el gobierno peruano recibe una sola carta de un congresista estadounidense, discutamos el tema... pero en 60 minutes, señala José Chlimper.