Los grandes bancos advirtieron que la OPEP debería actuar pronto debido a que los precios del crudo se están acercando a niveles que podrían descarrilar el crecimiento económico. Además advirtieron que la caída de la producción de otro país como Libia podría llevar a una escasez de crudo y obligar a disparar medidas de racionalización. Goldman Sachs dijo que el mundo no podría lidiar con otro recorte de producción como el de Libia, en momentos en que el precio del crudo Brent llegaba a US$120 por barril, el nivel más alto desde agosto del 2008 para cerrar finalmente a US$111.36. La petrolera italiana Eni, clave en el mercado petrolero libio, dijo que el miembro de la OPEP perdió un 75 % de su producción. "El mercado no puede soportar otra interrupción, según vemos, dado que los problemas en Libia absorben la mitad de la capacidad ociosa de la OPEP," dijo el analista de Goldman Sachs, Jeffrey Currie, en una nota de investigación.