Sobre la extensa bahía de San Nicolás, resistiendo un fuerte oleaje y ráfagas de viento que alcanzan los 33 nudos (58 kilómetros) de velocidad, permanece acoderado el Orient Brilliance, barco que chocó hace dos días contra una roca submarina. Exactamente, permanece a dos millas (unos cuatro kilómetros) de las costas del puerto de San Juan de Marcona.En tanto, un equipo de buzos apoyado por dos remolcadores trató ayer de evitar el naufragio de esta embarcación de bandera panameña. Además, peritos de la Capitanía del Puerto de San Juan de Marcona permanecen en el lugar.Los buzos, pertenecientes a una compañía particular, llegaron de Lima para trabajar en la reparación del casco del barco, el mismo que aún se mantiene a flote con las 142.900 toneladas de hierro que pretendía trasladar a la China .Ayer se confirmó que sus 25 tripulantes de nacionalidad india están ilesos. Ellos se encuentran en el interior del buque rindiendo su manifestación sobre lo ocurrido a los peritos de la Capitanía del Puerto.Sobre las naves que apoyan a los buzos trascendió que dos son de propiedad del agente naviero Consorcio Empresarial Naviero (AGNAV) y la otra es una patrullera de la capitanía. Estas trabajan para mantener a flote la pesada nave. Mientras tanto, el grupo de buzos trataba ayer de ubicar el forado producido en los cuatro tanques de agua de lastre, y de subsanar los daños cuanto antes. Solo así el buque recobrará su nivel normal.