La oposición de un grupo de pobladores de Ñaña (en el kilómetro 13,5 de la Carretera Central) ha generado que se detenga la construcción de dos líneas de transmisión que evacuarán cerca de 2.000 megavatios de energía eléctrica de Chilca para abastecer principalmente el norte del país. Según informó el presidente del Comité de Operación Económica del Sistema Interconectado Nacional, (Coes-Sinac), César Butrón, estas líneas permitirán reforzar el abastecimiento eléctrico de las líneas de transmisión que van hacia Chiclayo y Trujillo y que ya se encuentran congestionadas. "Su retraso puede ocasionar problemas", sostuvo. La empresa Consorcio Transmantaro, que construye las líneas, debió tener lista una primera línea de 220 kilovoltios (kv) en mayo pasado; mientras que la segunda (de 500 kv) debe empezar a operar en marzo del 2011.