La semana pasada el Ministerio de Energía y Minas (MEM) rechazó el estudio de impacto ambiental (EIA) del proyecto de ampliación del gasoducto de Camisea, perteneciente a TGP. Este hecho causó preocupación en varios operadores eléctricos debido a que se corre el riesgo de que la empresa no concluya el proyecto en el 2012, año en que fue programado su culminación.El MEM rechazó el EIA de TGP debido a que la empresa no levantó 82 observaciones hechas al documento. Tres compañías eléctricas (Duke Energy, Termochilca y Fénix Power) están por construir generadoras termoeléctricas con miras a abastecer al mercado a partir del 2012; sin embargo, el gas podría no llegar en esa fecha, pues la aprobación del EIA demoraría hasta seis meses más y probablemente tenga lista la obra hacia el 2013.TGP tenía programada una inversión de US$900 millones para ampliar el gasoducto de Camisea, pasando de de 450 millones de pies cúbicos diarios de gas natural (mpcd) a 920 mpcd en el 2012.La gerenta general de Termochilca, Tatiana Alegre, indicó que el impacto no solo sería para las empresas que no tendrían gas, sino también para el consumidor de energía eléctrica, puesto que estas plantas están programadas dentro de la oferta de abastecimiento eléctrico del 2012. Sin embargo, dijo que confiaba en que TGP llegue a tiempo con los plazos. (Edición sábado).