Tras realizar un paro preventivo de 24 horas, los comuneros de Ayabaca y Huancabamba, Piura, acordaron ayer elevar un memorial al gobierno regional para que derogue la resolución que autorizó a la minera Majaz a realizar sus operaciones en la zona. Ellos tomaron esa determinación pese a que César Trelles, presidente regional de Piura, aseguró en la víspera que ambas provincias, junto a San Ignacio de Cajamarca, serán incluidas en la mesa de diálogo instalada por el gobierno para solucionar el conflicto surgido en el lugar. Aunque la medida de fuerza fue pacífica, tanto Ayabaca como Huancabamba acataron la paralización totalmente.