El Paseo de los Héroes Navales, ubicado en el centro de Lima, frente a la sede del Poder Judicial, se convirtió ayer en escenario de una masiva protesta pacífica, cívica y moral contra la corrupción. Cientos de personas, la mayoría de ellas ataviadas con prendas blancas y con las manos pintadas o enfundadas en guantes del mismo color, acudieron a la convocatoria hecha por monseñor Luis Bambarén a fin de expresar su rechazo hacia esta lacra y a la impunidad. Gente de toda edad y condición social, portando carteles y coreando lemas, empezó a llegar pasado el mediodía al punto de reunión.Pasadas las cuatro de la tarde, desde un estrado, el organizador de la movilización hizo uso de la palabra para definir la tónica de ésta, la cual definió como un gesto de carácter ético y moral, mas no político. "Luchemos contra el virus de la corrupción que anida en los corazones y llena los bolsillos", manifestó el ex presidente de la Conferencia Episcopal, quien también pronunció las palabras de la oración del Padre Nuestro, acompañado de inmediato por las cientos de voces allí presentes.