En un pasaje de su exposición, Velásquez Quesquén expresó que no es enemigo de los pobladores de Quillabamba, y lamentó que algunos de ellos "tomen carreteras, incendien una estación en Kiteni y hayan querido tomar una estación de bombeo". "Si alguien dijo que el pueblo de Quillabamba es terrorista, levanto ese cargo, porque a aquellos pobladores que protestan por razones justas no se les debe dar esta denominación. Pero también alguien tiene que explicarle al país quienes iniciaron la violencia en la zona", añadió.