La ordenanza regional Nº 009-2005 promulgada el pasado 14 de julio por el gobierno regional de Tacna cayó como un baldazo de agua fría a todos los industriales textileros. ¿La razón?. Implica la autorización de comercialización de ropa y calzado usados en dicha región en perjuicio de los confeccionistas nacionales.Diego Calmet, asesor del Comité Textil de la Sociedad Nacional de Industrias (SNI), indicó que dicha ordenanza "no tiene valor legal y no puede derogar lo emitido por el Congreso", refiriéndose a la Ley Nº 28514 promulgada por el Legislativo que prohíbe definitivamente la importación de ropa y calzado usados con fines comerciales.Asimismo, Pedro Manzur, director de la Unión de Empresarios Textiles (Únete) señaló que la importación de ropa usada representa entre 30% y 40% en pérdidas y de hacerse efectiva la ordenanza de Tacna, cada región empezaría a sacar sus propias ordenanzas, y "automáticamente el país estaría invadido de ropa usada porque solo habría un pequeño sector que compraría ropa nueva".