El negocio de la importación de vehículos usados está muy cerca de llegar a su fin. El Gobierno decidió restringir de manera significativa la importación de vehículos y repuestos usados, mediante el aumento de los requisitos que deben cumplir para su internación y con la reducción de los beneficios tributarios de los que actualmente gozan.Lo primero ha sido poner un alto a la decisión del Tribunal Constitucional de autorizar la llegada de vehículos usados para transporte masivo de pasajeros y carga.Mediante decreto supremo publicado ayer, el Ministerio de Transportes y Comunicaciones (MTC) ordenó que solo se podrá importar vehículos con una antigüedad no mayor de 2 años y cuyas emisiones contaminantes no superen los límites máximos permisibles.(Edición sábado).