El oro cayó ayer siguiendo al dólar y a los mercados bursátiles en Estados Unidos, luego de que la Reserva Federal aseguró estar preparada para adoptar medidas adicionales a fin de estimular la economía del país si fuera necesario. El oro al contado frenó ganancias a 1.209,05 dólares la tarde del miércoles, desde un máximo de sesión de 1.217,85 dólares la onza. En la víspera el oro se cotizó a 1.210,65 dólares. La aversión al riesgo creció luego de que la Reserva Federal reveló su preocupación sobre una desaceleración del crecimiento de la economía en Estados Unidos, lo que afectó el dólar y las acciones. Previamente, el oro escaló luego de que las ventas minoristas estadounidenses cayeron en junio por segundo mes consecutivo, con lo cual se sumó a la evidencia de que la recuperación económica avanzaba a un ritmo más lento.