Diez días después del grave derrame de relaves con desechos tóxicos en las aguas del río Opamayo -que se extendió por los cauces de los torrentes Huachocolpa, Lircay, Urubamba, Cachi y Mantaro-, recién ayer el Ministerio del Ambiente declaró en emergencia ambiental el área afectada. A través de un dispositivo publicado en El Peruano, el mencionado portafolio también aprobó un plan para la recuperación de la zona y estableció un plazo de 90 días para que diversas instituciones públicas y la minera Caudalosa Chica pongan en marcha las medidas ambientales necesarias para evitar que los pobladores se sigan viendo perjudicados por el desastre ecológico.Aunque el experto en gestión integral de residuos peligrosos Percy Irribarren señaló que limpiar los terrenos y los ríos contaminados por un relave minero podría demorar entre tres y cuatro años, la minera Caudalosa indicó que ya se ha logrado limpiar el 30% de la cuenca de los ríos Escalera y Opamayo y que la limpieza total de la zona afectada demandaría 40 días.