Fueron miles los manifestantes que marcharon desde diferentes puntos de Lima para llegar hasta la sede del Congreso de la República y expresar allí la consigna que, durante los últimos días, la Confederación General de Trabajadores del Perú (CGTP) venía enarbolando como parte de sus máximas demandas: el rechazo al tratado de libre comercio (TLC) y la aprobación inmediata de una nueva legislación laboral.La convocatoria fue masiva y de hecho las autoridades vieron con preocupación cómo desde la 1:00 p.m. un grueso grupo de trabajadores de construcción civil tomaba, armado de palos y fierros, la Vía Expresa con dirección a Lima.Desde ese momento la policía decidió cerrar esa importante arteria metropolitana a la altura del puente Angamos, a fin de salvaguardar la seguridad de los conductores. Sin embargo, con ello el tránsito se hizo infernal por algunos minutos en las avenidas Aramburú y Córpac. Poco después ocurrió lo mismo en la plaza Grau.Pero los efectos de la protesta callejera no quedaron solo allí. La avenida Alfonso Ugarte tuvo que soportar desde las 2:00 p.m. otra gran congestión de vehículos debido a que las plazas Dos de Mayo y Unión también fueron tomadas por otro grupo de manifestantes.