Policías y soldados tomaron ayer el control de La Oroya, al cumplirse el segundo día de la huelga general decretada por los trabajadores de la Doe Run Perú. No obstante que la Carretera Central estaba libre de obstáculos, solo algunos camiones y automóviles particulares transitaron por dicha vía. Ningún ómnibus ha circulado desde el domingo.La numerosa presencia policial y militar se impuso, y a medida que pasaba la mañana grupos de trabajadores en huelga de Doe Run se agrupaban en los sectores Paccha, Curipata, La Oroya Antigua, Marcavalle, sin poder bloquear la vía.