Las industrias nacionales empezarán a sentir los efectos de reservar para la exportación parte del famoso gas de Camisea (Lote 88) en lugar de destinarse al mercado interno, pues ahora las compañías solo podrán acceder al gas natural de otros lotes, el cual no tiene precios regulados y podría costar el doble que el de Camisea.Tras concluir en enero la licitación de Pluspetrol, mediante la cual se ofertaron 80 millones de pies cúbicos diarios (mpcd) de gas del Lote 88, la oferta solo pudo cubrir la demanda de dos empresas, pero nueve compañías no recibieron abastecimiento por un total de 58 mpcd de gas.Ante ello el gobierno anunció que Repsol pondría en marcha una nueva licitación de gas del Lote 57 (cerca de Camisea) por 155 mpcd. Sin embargo, también adelantó que el gas del Lote 57 tendrá libertad de precios. Aurelio Ochoa, especialista en energía, refirió que en estos casos se toma como referencia el precio internacional, actualmente en US$ 4 por millón de BTU. "Este precio es casi el doble del que pagan las industrias que compran gas del Lote 88 (a US$ 2,7 por millón de BTU) y será ocho veces mayor que el precio de exportación", subrayó.