Unos mil pobladores de La Convención se reunieron ayer en la zona de Kiteni, cerca de los ductos del gas de Camisea, y anunciaron la posible toma del proyecto. La medida busca presionar a las autoridades para que hallen una solución a su demanda de que las tuberías del tendido del gasoducto no afecten el santuario de Megantoni.Tras la advertencia, unos 100 policías se trasladaron en helicóptero a la zona y resguardaron las instalaciones gasíferas. Por su parte, el premier Javier Velásquez Quesquén opinó que las protestas no tienen fundamento y que son impulsadas por "politiqueros" con aspiraciones en las próximas contiendas electorales.