La ministra de Trabajo y Promoción del Empleo, Manuela García, sustentó ante delegaciones de Argentina, Bolivia, Brasil, Chile, Colombia y Ecuador, el proyecto que plantea modificar el Código Penal para endurecer las penas de cárcel elevándolas hasta los diez años a los malos empleadores que provocan accidentes de trabajo mortales o graves. Explicó que se ha propuesto incorporar el artículo 168-A al Código Penal, el cual establece que de producirse un accidente de trabajo con consecuencias de muerte o de lesiones graves para los trabajadores o terceras personas, como consecuencia de no respetar las normas de seguridad y salud en el trabajo, se aplicará una pena de cárcel no menor de cinco años ni mayor de diez.