Si existe un organismo que se ha visto envuelto en escándalos de corrupción, ese es Petroperú, la empresa estatal encargada desde hace casi 36 años de satisfacer las demandas de combustible del país.Los cuestionamientos han llegado de todos los frentes, tanto del político como del técnico; es por ello que diversos analistas han llegado a la conclusión que su privatización es necesaria o, en el mejor de los casos, el ingreso de la inversión privada para evitar el colapso de la Refinería de Talara, principal refinería del Perú.La refinería de Talara se encuentra en una situación muy buena, funcionando al 95% de su capacidad; sin embargo, en cualquier momento puede colapsar debido a su antigüedad y al posible desgaste que pueda sufrir. Por ello es urgente la participación privada, que aún no se atrae a pesar de que en este momento se cuenta con dinero en el mercado interno y que los inversionistas institucionales se encuentran sumamente activos.El analista Aurelio Ochoa consideró que "en este momento la refinería de Talara es muy atractiva para la inversión privada, debido a su capacidad. Si bien es cierto que se necesita la presencia de la empresa privada, ésta debe pasar previamente por un concurso público".