SOBRE TÍA MARÍA, CHALA E ISLAY
22 de abril de 2010

Los últimos acontecimientos de movilizaciones en el Perú preocupan en un año electoral, aunque tal vez algunos eran previsibles. No faltarán en estos meses aquellos que quieran lograr un espacio en la arena política nacional, regional o municipal. Debemos estar advertidos y distinguir los intereses políticos coyunturales de los objetivos nacionales. La actuación del Gobierno en esta coyuntura será una señal para futuras inversiones. La empresa privada tendrá que trabajar para lograr la adhesión popular a los proyectos, pues es necesaria la licencia social. Agricultura versus minería suele ser el conflicto. En Tía María, el tema del agua es crucial, la empresa y el Gobierno consideran que las preocupaciones tenían soluciones técnicas. Se invertirán US$1,000 millones y se generarán 3,500 empleos. El agua utilizada no será de la napa freática, sino del mar o de represas, y el tema ambiental deberá ser atendido usando estándares muy exigentes y tecnología moderna. El futuro de Islay puede ser diferente, ojalá prevalezca la discusión técnica y no la ideología sin alternativas concretas, señala Alfredo Ferrero.