Un amago de desbloqueo de la Panamericana Sur y una notoria división entre los manifestantes caracterizaron el quinto día de protestas por el proyecto minero Tía María de la empresa Southern Perú. Ante la persistencia en la interrupción de diez kilómetros de la mencionada carretera a la altura de la provincia arequipeña de Islay, la policía tenía orden de desalojar a los manifestantes a las 6 a.m. de ayer.Sin embargo, esta acción fue detenida ante la visita de la defensora del Pueblo, Beatriz Merino. Ella se reunió con los dirigentes y con los alcaldes de los distritos de Cocachacra y Dean Valdivia, quienes lideran la protesta.Merino conversó con los pobladores durante tres horas en el local de la Municipalidad de Cocachacra, donde les informó en reiteradas ocasiones que la forma de protesta que utilizan era un delito sancionado por ley y que las autoridades del Ministerio Público y la policía podrían tomar acciones para detenerla.