El precio del oro acumuló ayer su quinta jornada al alza, con lo que ahora se sitúa cerca a su máximo nivel alcanzado en lo que va del año. Su cotización cerró ayer en US$ 1,152 por onza en Nueva York. El repunte se produce esta vez en medio de temores por problemas fiscales en algunos países de la Unión Europea.Aunque por ahora los ojos están puestos en Grecia, las perspectivas en otros países como Portugal e Irlanda, e incluso España, despiertan los temores sobre la economía del bloque, así como también en su moneda: el euro. El alza del precio del oro ocurre pese al fortalecimiento del dólar, con cuya cotización, el metal precioso suele tener una relación inversa.Al registrarse un debilitamiento del euro, el oro viene siendo ahora visto como una alternativa de inversión a la moneda del bloque, incrementando su demanda y precio. Pero en la actualidad el oro estaría siendo impulsado, además, por factores fundamentales, como una mayor demanda para joyería en India, que junto a China, son los mayores consumidores del metal precioso. Además, pese a las tensiones por Grecia, una mayor confianza que se observa en la recuperación de la economía mundial ayuda también a impulsar la cotización del metal dorado. Por ello no sería raro que el oro acentúe su brillo y alcance los US$ 1,200 por onza para fines del presente trimestre.Aun cuando, dados los vaivenes actuales de los mercados, no sería raro que se pueda en algún momento quebrar la racha alcista del oro, todo parece indicar que mantendría su tendencia al alza. Ello porque es de esperarse que más adelante el dólar vuelva a mostrar debilitamiento, a la par que se expanden los "brotes verdes" en la economía mundial, aunque ello se produzca de manera desequilibrada, con China a un fuerte ritmo y Europa a paso lento. Siendo el Perú un gran exportador del metal dorado, un mayor precio ha de representar mayores ingresos por exportaciones, además de incentivar el desarrollo de nuevos proyectos. No obstante, el alza del oro no debería significar que no busquemos una mayor diversificación de los ingresos por exportaciones del país. Más aun si se toma en cuenta lo volátil que pueden resultar los precios de los commodities en situaciones como las vividas desde el 2008, cuando estos tuvieron fuertes caídas.