El oro subió ayer a su nivel más alto en un mes, mientras que el metal precioso cotizado en euros tocó un récord, debido a la incertidumbre cambiaria y preocupaciones por las economías más pequeñas de la zona euro que impulsaron compras de refugio. Los futuros estadounidenses de oro para junio cerraron con un alza de US$ 2.20, llegando a US$ 1,136 la onza en el mercado de Nueva York. El oro denominado en euros subió a un récord de 851.04 euros la onza, frente a los US$ 837.68 del lunes. El oro subió pese a la fortaleza del dólar, mostrando que ocasionalmente la relación inversa entre el metal precioso y la divisa estadounidense se rompe si la aversión por el riesgo hace que los inversionistas acudan al oro.