El Perú como destino de inversiones, con estabilidad política, seguridad jurídica y que impulsa la industria minera con responsabilidad social y ambiental, es protagonista en el evento mundial: Prospectors and Developers Association of Canada (PDAC) 2010, que se desarrolla en estos momentos en Toronto.El ministro de Energía y Minas, Pedro Sánchez, quien encabeza una delegación de autoridades gubernamentales y empresarios privados, expondrá y explicará ante representantes de grandes consorcios mineros internacionales el Mapa de Unidades Mineras en Producción y Proyectos de Exploración que está difundiendo su portafolio.El interés que existe en el mundo por las inversiones mineras en el Perú quedó plenamente demostrado durante la crisis financiera mundial, durante la cual los inversionistas mineros extranjeros y nacionales no se retiraron y siguieron apostando por el Perú.Hoy, en el evento minero de Toronto, una verdadera vitrina de la minería mundial, el Perú se presenta como un país que ha consolidado su actividad minera, con una proyección de inversiones de 5,000 millones de dólares para este año y con una cartera de proyectos de más de 30 mil millones de dólares para los próximos seis años.Los recursos generados por la minería y aportados a las regiones en los últimos tres años superan los 15,000 millones de nuevos soles, bajo los conceptos de canon minero, regalías, derechos de vigencia y aportes voluntarios.En Toronto también se informará que el Perú ha consolidado su condición de primer productor mundial de plata, con una reserva histórica de 2,040 millones de onzas finas. La plata, al igual que el oro y el cobre, son tres metales muy vinculados a la historia peruana porque se producen desde la época prehispánica.El país se mantiene como el segundo productor de cobre en el mundo y en América Latina.También somos el primer productor de oro en la región y estamos en sexto lugar en el mundo. Las reservas actuales de oro del Perú son del orden de 81 millones 396 mil onzas finas.En los últimos años el Gobierno despliega todos sus esfuerzos por acabar con la minería informal y, a la vez, impulsar las inversiones mineras nacionales y extranjeras. De esta forma, el desarrollo de la minería continuará siendo una de las armas más eficaces en la lucha contra la pobreza y el subdesarrollo.Todo esto en un marco de modernidad, alta tecnología, responsabilidad social y ambiental plena, protegiendo el medio ambiente y auspiciando obras de desarrollo local en las regiones mineras, con mayor generación de trabajo para la población. El Perú minero avanza.