Las protestas de diversos grupos de tendencia izquierdista en contra de las empresas mineras por supuestos daños medioambientales y compromisos incumplidos, empiezan a dar amargo fruto.El principal sector exportador del Perú es el minero y representa más del 50% de las ventas del país en el exterior. Sin embargo, últimamente se ha visto golpeado por diversas manifestaciones e intromisiones por parte de la población, como en el caso de Tintaya, que por medidas de seguridad tuvo que paralizar sus operaciones durante casi un mes.En este contexto, las ventas al exterior de los productos mineros, según información proporcionada por la Sociedad de Comercio Exterior del Perú (ComexPerú), han experimentado un descenso durante los meses de abril, mayo y "de una manera dramática" durante los primeros veinte días del presente mes.Así, de haber vendido al exterior durante el mes de marzo más de US$ 750 millones, en abril las ventas bajaron a US$ 670 millones; en mayo siguieron bajando, esta vez a US$ 639 millones, mes en que se produjo el asalto al campamento de la empresa minera Tintaya y los problemas en Huaraz, donde se ubica Antamina. Pero el mayor descenso de ventas se ha producido en el mes de junio, llegando apenas a US$ 127 millones, siendo uno de los productos más afectados el cobre, precisamente el material que produce Tintaya.Las ventas de cobre en abril rozaron los US$ 115 millones; en mayo bajaron a US$ 88 millones, mientras que hasta el 20 de junio descendieron a US$ 22 millones.Para José Chlimper, presidente de ComexPerú, la inestabilidad social no sólo perjudica a la minería, sino a todos los sectores productivos."No pensemos solamente en todo lo que se ha perdido por las protestas contra las empresas mineras, sino que esto se extiende a los otros sectores y pone en peligro las futuras ventas al exterior", explicó Chlimper.
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